Descubra Meknes en un recorrido gratuito por sus monumentos históricos y bullici
Meknes, una de las cuatro ciudades imperiales de Marruecos, suele quedar eclipsada por las cercanas Fez y Marrakech, pero su importancia histórica y su ambiente relajado la convierten en una joya oculta que merece la pena explorar. Fundada en el siglo XI, Meknes floreció bajo el sultán Moulay Ismail, que la convirtió en su capital en el siglo XVII. La mezcla de gran arquitectura, antiguas medinas e historia real de la ciudad ofrece una alternativa más tranquila pero igualmente fascinante a las ciudades más turísticas de Marruecos.
Un recorrido gratuito por Meknes le permitirá conocer su pasado real. Comience con una visita a Bab Mansour, una de las puertas más impresionantes de Marruecos, adornada con intrincados azulejos zellij e inscripciones talladas. En el interior de la antigua medina, encontrará el Mausoleo de Moulay Ismail, donde está enterrado el sultán que construyó gran parte de Meknes. La serena grandeza de este lugar refleja las raíces imperiales de la ciudad.
Otra atracción clave son los graneros de Heri es-Souani, donde enormes bóvedas de piedra almacenaban antaño grano para las caballerizas reales. Los establos reales adyacentes, construidos para albergar miles de caballos, dan a los visitantes una idea de la magnitud de las ambiciones del sultán. Más allá de estos lugares históricos, la medina de Meknes ofrece un ambiente más relajado que las de Fez o Marrakech, lo que la convierte en un lugar perfecto para explorar a su propio ritmo. No deje de probar la cocina local y visitar las cercanas ruinas romanas de Volubilis, que también pueden incluirse en una excursión gratuita.